Endocarditis infecciosa
La endocarditis infecciosa es una infección grave del endocardio, el revestimiento interno del corazón, que con frecuencia afecta las válvulas cardíacas. Es causada por microorganismos (principalmente bacterias) que ingresan al torrente sanguíneo y se adhieren a zonas dañadas del corazón.
Causas:
La mayoría de los casos son provocados por:
- Bacterias, como Staphylococcus aureus, Streptococcus viridans o Enterococcus
- Menos frecuentemente, hongos (especialmente en inmunosuprimidos)
Los gérmenes pueden entrar al cuerpo por:
- Procedimientos dentales, respiratorios o gastrointestinales
- Infecciones en la piel o encías
- Uso de drogas intravenosas
- Dispositivos médicos (marcapasos, catéteres)
- Cirugías cardíacas previas
Factores de riesgo:
- Válvulas cardíacas dañadas o artificiales
- Cardiopatías congénitas
- Historia previa de endocarditis
- Uso de drogas intravenosas
- Inmunosupresión
Síntomas:
Pueden ser agudos (rápida aparición) o subagudos (lentos y progresivos). Los más comunes incluyen:
- Fiebre persistente
- Escalofríos y sudoración nocturna
- Fatiga y debilidad
- Dolor muscular o articular
- Pérdida de apetito y peso
- Soplo cardíaco nuevo o cambiante
- Petequias (manchas rojizas en piel o mucosas)
- Lesiones de Janeway, nódulos de Osler, manchas de Roth (menos comunes)
Complicaciones:
- Insuficiencia valvular
- Embolias (coágulos infectados que viajan a otros órganos)
- Accidente cerebrovascular (ACV)
- Abscesos cardíacos
- Insuficiencia cardíaca
Diagnóstico:
- Hemocultivos: detección del microorganismo en sangre
- Ecocardiograma transtorácico o transesofágico: visualización de vegetaciones en las válvulas
- Pruebas de laboratorio: anemia, elevación de leucocitos, VSG o PCR
- Criterios de Duke modificados (para diagnóstico clínico)
Tratamiento:
- Antibióticos intravenosos prolongados (de 4 a 6 semanas), ajustados según el germen
- En algunos casos, cirugía cardíaca para reparar o reemplazar válvulas dañadas
- Tratamiento de infecciones oportuna en personas con riesgo
Prevención:
- Higiene bucal adecuada
- Profilaxis antibiótica antes de procedimientos dentales en pacientes de alto riesgo
- Evitar el uso de drogas intravenosas
- Control adecuado de infecciones en pacientes con dispositivos médicos
Pronóstico:
Con diagnóstico y tratamiento adecuados, muchas personas se recuperan. Sin embargo, el pronóstico empeora si hay retraso en el tratamiento, afectación valvular grave, embolias o infección por organismos resistentes.
