Crup

El crup (también llamado laringotraqueítis viral) es una enfermedad respiratoria que afecta principalmente a niños menores de 5 años, caracterizada por inflamación de la laringe, la tráquea y en ocasiones los bronquios. Esa inflamación provoca un estrechamiento de las vías respiratorias superiores, generando síntomas distintivos como la tos perruna, la ronquera y el estridor, un sonido agudo al respirar.

¿Qué causa el crup?

La mayoría de los casos son provocados por virus, especialmente:

• Virus parainfluenza (la causa más común)
• Virus sincitial respiratorio (VSR)
• Influenza
• Adenovirus
• Sarampión (menos frecuente gracias a la vacunación)

El virus invade las vías aéreas superiores, provoca inflamación de las mucosas y genera un exceso de moco, reduciendo el diámetro de la vía aérea y dificultando el paso del aire.

¿Quiénes se enferman más?

El crup suele aparecer en:

• Niños entre 6 meses y 3 años
• Más frecuente en otoño e invierno
• Más común en niños que ya tienen antecedentes de infecciones respiratorias recurrentes o reactividad de vías aéreas

En adultos es raro porque sus vías aéreas son más grandes.

Cómo se contagia

El contagio ocurre por:

• Gotas respiratorias (al toser o estornudar)
• Contacto con manos contaminadas
• Objetos o superficies infectadas

Los virus sobreviven en superficies por varias horas, por lo que la higiene es clave.

Síntomas principales

El crup suele comenzar como un resfriado común. Después de 1 o 2 días, los síntomas característicos aparecen:

1. Tos perruna

Un sonido fuerte, metálico, parecido al ladrido de una foca. Es el sello clínico del crup.

2. Ronquera

Por la inflamación de las cuerdas vocales.

3. Estridor inspiratorio

Un sonido agudo y chillante al tomar aire, que indica estrechamiento importante de la vía aérea.

4. Dificultad respiratoria

Puede verse:

• Aleteo nasal
• Hundimiento de las costillas (tiraje)
• Respiración rápida o agitada

5. Fiebre

Generalmente moderada, aunque puede ser más alta en casos de influenza.

6. Empeoramiento nocturno

Los síntomas suelen ser más intensos en la noche debido a la posición al dormir y a cambios fisiológicos del organismo.

Clasificación según gravedad

Crup leve

• Tos perruna
• Ronquera
• Estridor solo al llorar

Crup moderado

• Estridor en reposo
• Dificultad respiratoria evidente
• Agitación

Crup grave

• Estridor intenso
• Mucho trabajo respiratorio
• Cianosis (color azulado en labios)
• Fatiga o somnolencia

El crup grave es una emergencia médica.

Diagnóstico

El diagnóstico es clínico, basado en la historia y los síntomas.

No suele requerir estudios, pero en casos atípicos se pueden realizar:

• Radiografía de cuello: muestra el signo del “lápiz” o “punta de lápiz”.
• Pruebas virales (influenza, VSR) si se necesitan para manejo.

Tratamiento

En casos leves

• Aire humidificado o vapor tibio
• Mantener al niño tranquilo (el llanto empeora el estridor)
• Buena hidratación
• Vigilar signos de alarma

Medicamentos

1. Corticoides (primera elección):
   
   • Dexametasona por vía oral o intramuscular.
     Reducen la inflamación de la vía aérea.
3. Nebulizaciones con epinefrina
   Se usan en crup moderado o grave para disminuir el edema y abrir la vía aérea rápidamente.
   Su efecto es temporal, por lo que se mantiene vigilancia médica.

Hospitalización

Indicada si hay:

• Estridor en reposo persistente
• Dificultad respiratoria severa
• Recaída después de epinefrina
• Deshidratación
• Menores de 6 meses con síntomas intensos

En casos extremos puede requerirse intubación, aunque es poco frecuente.

Complicaciones

Aunque la mayoría de los niños se recuperan totalmente, pueden aparecer:

• Insuficiencia respiratoria (muy poco común)
• Neumonía viral o bacteriana secundaria
• Deshidratación por fiebre y dificultad para beber líquidos
• En casos muy raros, progresión a crup espasmódico (de inicio súbito, a menudo nocturno)

Prevención

• Lavado de manos frecuente
• Evitar contacto con personas enfermas
• Limpieza de juguetes y superficies
• Vacunación adecuada (influenza, sarampión)
• Evitar fumar cerca de niños
• Ventilación de espacios cerrados

Pronóstico

El crup tiene una evolución generalmente buena.

Los síntomas suelen durar 3 a 7 días, con el pico máximo en la noche del segundo o tercer día.

La mayoría de los niños se recuperan sin ninguna secuela.